sábado, 5 de agosto de 2017


LA HUELGA



Intro.

La lucha del trabajador es constante. La necesidad de llevar el pan a la casa y poder mantener a una familia se hace cada vez más angustiante. ¿Qué se puede pedir del hombre que trabaja y su esfuerzo es equivalente a unas ridículas monedas? ¿Cómo puede ese hombre levantarse del fango?






Cuerpo.

El experimental Sergei Eisenstein fue un teórico del cine y buscó impulsar sus tratamientos sobre el montaje y el cine en cada una de sus entregas. La magnificencia de Eisenstein a través de filmes como El Acorozado Potemkin, Alexander Nevsky o las dos partes de Iván el Terrible son solamente ejemplos de un gran director exaltando el sétimo arte, al mismo tiempo que debía combatir con las rigurosidades de la política soviética de esos tiempos. La Huelga es el comienzo de sus largometrajes y el difícil camino de sobrellevar la censura en su país, al mismo tiempo que creaba obras irrepetibles e influyentes.




En su juventud, Eisenstein tendría diversas influencias, sobre todo del teatro y de la cultura japonesa. El director soviético utiliza todas estas formas artísticas para poder incursionar en el ambiente fílmico de su país y para demostrar ciertas teorías, que para ese tiempo escribía como ensayos en algunas publicaciones. Envuelto en el teatro, su primer intento en el cine sería el cortometraje El Diario de Glumov, de 1923, marcando su transición del cine al teatro. A partir de ello también comenzaría su asociación con diferentes personalidades del cine soviético y una mayor comprensión con las autoridades.




Debido a la asociación del cine soviético con la propaganda política, los directores componían sus obras a partir de los lindes revolucionarios y valiéndose de ello, Eisenstein lograría su propio estilo, al aplicar sus teorías y “cumplir” con el deseo de mostrar una Unión Soviética unida a través del proletariado. 1925 sería un año especial para el realizador, ya que no solamente sería la presentación de su primer largometraje, sino también los que muchos consideran su obra maestra, El Acorazado Potemkin. Dos años después crearía Octubre y su reconocimiento internacional no se haría esperar.




La Huelga nos presenta la lucha del trabajador contra los poderes que lo suprimen. No faltó de problemáticas, la obra quería mostrar una serie de filmes sobre el proletariado, pero quedaría en una sola entrega. El filme estaría dividido en seis partes en donde rápidamente se nos muestra las condiciones laborales en una fábrica, lo que llevará a la huelga de los bolcheviques y su consiguiente supresión. Una de las primeras reglas que Eisenstein imprimiría sería mostrar al grupo y no al individuo, promoviendo de esta manera la idea del proletariado y creando una imagen universal sobre la situación del obrero.




En La Huelga también veremos sus ideas de montaje, en donde utiliza imágenes diferenciadas pero asociadas según la situación, algo que también comienza a trabajar en la edición. Imágenes de animales, objetos resaltados según los momentos y un uso particular de la velocidad de las tomas cuando se trata del incendio o de la lucha final. La visión de Eisenstein sería aprobada y recompensada con la creación de su siguiente proyecto, lo cual le permitiría la mayor exposición de sus ideas del montaje, vanagloriadas y reconocidas por los grandes creadores y críticos del sétimo arte. Mediados de los años veinte es un momento clave para el cine soviético. La represión permitió a los creadores a buscar maneras de presentar sus obras sabiendo luchar con una situación política complicada, pero al final terminaría costándoles su libertad o sus diferentes expresiones artísticas. Eisenstein, Dziga Vertov, Alexander Dovzhenko, Vsevolod Pudovkin, Yakov Protazanov, entre otros, fueron sus grandes representantes pero en muchos casos las obras terminarían cortadas, mutiladas o censuradas, lo cual llevaría muchos años antes del reconocimiento internacional.





Datos.

Título Original: Stachka
Dirección: Sergei Eisenstein
Año: 1925
País: Unión Soviética
Intérpretes: Maksim Shtraukh, Grigori Aleksandrov, Mikhail Gomorov, I. Ivanov, Ivan Klyukvin, Aleksandr Antonov, Yudif Glizer
Duración: 82 min.

martes, 1 de agosto de 2017


CORAZÓN OLVIDADO




Intro.

Una tormenta entre el amor de dos personas. Una tormenta y una carta. Los caminos a elegir siempre son confusos y totalmente complejos… la humanidad decide su destino simplemente entre el silencio y la niebla.





Cuerpo.

Erich von Stroheim comenzaría su periplo en el cine siendo un actor de reparto para el gran director americano D. W. Griffith. Su insistencia y necesidad por ser parte creativa de este nuevo medio lo llevó a ser uno de los asistentes de dirección en la descomunal Intolerancia del mismo director. La idea de Stroheim era hacerse un mundo en el cine a partir de la creación de obras que tuvieran que ver tanto con la dirección así como con el guion y la producción. Después de casi una década alternando sobre todo como actor secundario, von Stroheim encontraría su oportunidad en 1919, dirigiendo su primera película, Corazón olvidado.




Llamada también Esposos ciegos (traducción literal del título en inglés), Corazón olvidado es la ambiciosa propuesta de von Stroheim quien es el director, guionista, productor y protagonista de este drama de enredos amorosos. Von Stroheim (quien sería conocido bajo el apelativo de “el hombre que adoras odiar”) interpreta al conocido exótico extranjero en busca de aventuras con damas casadas. Si bien este arquetipo de personaje sería una firma muy personal del director austriaco, esta es su primera entrega y vemos a un von Stroheim joven y cuya arrogancia en el filme aún no tiene ese poder que podrá imprimir en futuras obras. Sí nos encontramos con un director perfeccionista, que desde un primer momento demostrará cierto despotismo en el trato con sus actores.




El filme está rodeado de actores muy recurrentes en el cine mudo pero no tan destacados. Aunque entre ellos podemos destacar la presencia de Gibson Gowland, un actor recurrente de reparto y cuyo único rol estelar sería el del clásico Avaricia, la obra maestra de von Stroheim. Sam de Grasse, conocido villano del cine mudo, y Francelia Billington, quien tendría gran participación del cine silente pero cuya última gran obra sería esta película de von Stroheim, son lo más destacado del reparto. Esta actriz también se destacaría por ser una gran camarógrafa.




Basado en cierto código de moralidad, von Stroheim suele presentar sus dramas conyugales bajo la idea de la tentación y el pecado (o un supuesto pecado, en su defecto), para después demostrar la rectitud del ser humano en cuanto a reconocer sus errores y volver a la felicidad del matrimonio. Lo destacado de estas obras no solamente es el tema sino la configuración del personaje antagonista, que al ser interpretado por el mismo director, deben conllevar una fuerza peculiar. Tanto en esta, como en Esposas frívolas y su interrumpida El carrusel de la vida, la atracción no es solamente el juego de tentación sino también el descubrimiento de relaciones sentimentales sosas e ineficientes, lo que permite así una explicación casi racional de las decisiones erróneas de los personajes principales.




Pero esto es el comienzo de lo que será el maestro von Stroheim. Su bien podemos ver bosquejos de su refinada técnica, lo que más podemos resaltar es el uso de la temática, los simbolismos, los estereotipos como interesantes fórmulas de presentación, la seducción y el coraje de los personajes para aceptar y combatir los cambios. Faltarían todavía algunos años para depurar su genio, así como su conocida arrogancia y su lucha titánica con el productor Irving Thalberg, pero von Stroheim ya estaba cimentando su nombre en Hollywood, lo que lo convertiría en uno de los grandes directores del cine mudo.





Datos.

Título Original: Blind Husbands
Dirección: Erich von Stroheim
Año: 1919
País: Estados Unidos
Intérpretes: Erich von Stroheim, Sam de Grasse, Francelia Billington, Gibson Gowland, Fay Holderness, Ruby Kendrick, Valerie Germonprez, Jack Perrin, Richard Cummings, Louis Fitzroy, William de Vaull
Duración: 91 min.