viernes, 11 de diciembre de 2020

 
EL ABRAZO DE LA MUERTE




Intro.
 
El amor hace que cometamos locuras. Entender cuando acaba el amor nos vuelve locos. Entender que aquella mujer con la cual creías que estarías toda la vida y ahora no está a tu lado te vuelve loco. Entonces, cuando empiezas a cometer actos irracionales, ¿puedes justificarlos por tu pérdida amorosa? ¿O simplemente siempre fuiste así y no te habías dado cuenta? ¿Qué eres capaz de hacer por amor? Tal vez nunca tuviste moral, o tal vez simplemente estabas esperando por ese ser femenino para que te domine y te lleve a lo más profundo del infierno…







Cuerpo.
 
Dentro del film noir existen muchos nombres de directores, actores y actrices que están ligados debido a sus diferentes apariciones en el género. Este es el caso de Robert Siodmak. El director de origen alemán presentó algunas entradas interesantes en sus inicios pero debido al nazismo tuvo que emigrar a Francia y después a Hollywood. Desde comienzo de los años cuarenta, su figura crecería a partir de ciertos dramas y el film noir. Comenzando con La Dama Desconocida (1944), pasando por La Escalera de Caracol (1945) y con la tan aclamada Forajidos (1946), encontraremos en 1949 a El Abrazo de la Muerte que lo volverá a reunir con Burt Lancaster.






Burt Lancaster es una figura única en el cine mundial y una gran figura del film noir, pero para 1949 recién empezaba su meteórica carrera. Aunque en solo tres años de su debut, Lancaster ya tenía grandes film noirs en sus espaldas como Forajidos (1946), Fuerza Bruta (1947) y Voces de Muerte (1948). En El Abrazo de la Muerte, Lancaster comparte roles con Yvonne de Carlo. La actriz ya asociada con su personaje más famoso, Lily Monster en la serie Los Monsters de los años sesenta, comenzó su carrera como un sex symbol, decidiendo borrar ese estereotipo al participar en Fuerza Bruta y El Abrazo de la Muerte. Junto a Lancaster construyen una muy buena pareja. Para cerrar el triángulo encontramos al eficiente y funcional Dan Duryea, un malo frecuente del film noir y un actor de carácter muy talentoso. Duryea tiene una innumerable lista de personajes con un sello particular, pasando por diferentes géneros y expandiendo su carrera por cuatro décadas en cine y televisión.






Basada en la novela de Don Tracy y escrita por Daniel Fuchs, El Abrazo de la Muerte es un film noir que en un comienzo no alcanzó popularidad y tuvo críticas diversas. A medida que las estrellas de su director y protagonistas crecían, la imagen de la película fue cambiando y tomando la forma de un clásico del género. La historia nos muestra al antihéroe Steve Thompson quien trata de recobrar el amor de su exesposa Anna Dundee pero a partir de ello entrará en un mundo oscuro sellando su destino. Al igual que muchos noirs, la idea de retribución es un acto constante y que paulatinamente nos va a mostrar el destino de los personajes. Encumbrados por los flashbacks, las sombras, el juego de cámaras, los giros de guion, la película se desarrolla en un personaje principal de extrañas formas y motivos pero encausado en una lucha justa como es el amor.






La película es renombrada por el cinismo de sus personajes y por las motivaciones algo confusas y sin una solidez, pero que crean personajes impredecibles buscando que así también se desarrolle la historia. El Abrazo de la Muerte estaría rodeado de muchas anécdotas, desde el debut cortísimo de Tony Curtis en una escena de baile, hasta la muerte del productor Mark Hellinger, lo cual casi lleva a la cancelación de la película. La experiencia de Siodmak con el género ayuda a proponer una película fuerte y precisa, logrando los fines del género y rodeando la actitud de los personajes, apoyándose en las capacidades de sus actores, quienes se convertirían en estrellas a toda medida.






Datos.
 
Título Original: Criss Cross
Dirección: Robert Siodmak
Año: 1949
País: Estados Unidos
Intérpretes: Burt Lancaster, Yvonne de Carlo, Dan Duryea, Stephen McNally, Esy Morales, Tom Pedi, Percy Helton, Alan Napier, Griff Barnett, Meg Randall, Richard Long, Joan Miller, Edna Holland, John Doucette
Duración: 88 min.

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