UGETSU
Intro.
El amor es eterno. Cuando los cuerpos son invisibles y todo aquello que
importa es una mirada, el amor es eterno. Cuando las paredes se recubren de
recuerdos y puedes hablar otros idiomas, entonces el espíritu es eterno.
Podemos traspasar montañas, podemos ver espadas traspasando cuerpos, podemos
ver palabras traspasando el tiempo y los seres humanos moviéndose lentamente
hacia sus propios destinos. Podemos observar un mundo dentro de un mundo y todo
tan lentamente… todo conspirando con nuestros propios sueños y nuestros propios
deseos. Podemos permanecer con nuestros ojos cerrados y observar la belleza del
mundo. No hay diferencia entre la vida y la muerte, no hay diferencia cuando el
amor es eterno.
Cuerpo.
Ugetsu,
o Cuentos de la Luna Pálida de Agosto, es la obra cumbre del gran director
japonés Kenji Mizoguchi. La película ha sido nombrada como una de las mejores
películas del séptimo arte, siendo junto a Rashomon uno de los pilares del
descubrimiento internacional del cine japonés en los años cincuenta. Ugetsu
ganaría el León de Plata en el Festival de Venecia siendo parte de una trilogía
de películas por parte del director japonés en ganar este premio. Estas fueron La Vida
de O-Haru en 1952, Ugetsu en 1953 y El Intendente Sansho en 1954. Mizoguchi, al
igual de Kurosawa y Ozu, es uno de los directores más renombrados del cine
japonés y señalado como uno de los tres monstruos en poner el cine de su país
en la mira mundial. La calidad y sensibilidad de sus películas, así como la
sofisticación en el guión y la cinematografía han hecho de Mizoguchi uno de los
directores de culto y de gran renombre para otros futuros directores.
Después
de la consagración de La Vida de O-Haru y Una Geisha, el siguiente proyecto de
Mizoguchi resultaría ser su película más célebre. Ugetsu se basaría en la
historia homónima de Ueda Akinari, una historia de fantasmas durante el
período jidaigeki (literalmente, drama épico). Debido al éxito de La Vida de O-Haru,
Mizoguchi tuvo mayores facilidades y presupuesto para completar esta película,
lo cual también le proporcionaría mayor libertad artística en cuanto al
producto en sí. La rigurosidad de Mizoguchi en cuanto a Ugetsu estaría
demostrada en su necesidad por la perfección. La sensibilidad que demostró en
sus anteriores filmes se ve enaltecida por la temática y por la búsqueda de la
presentación como si fuera una pintura, tal cual como se la describiría a su
principal cinematógrafo, Kazuo Miyagawa, en donde las sugerencias a
sentimientos y reacciones se encuentran bien ejemplificadas, así como una
necesaria lentitud para prolongar algunas escenas, elongando así los motivos
dentro de la película. Inusualmente, Ugetsu no sería un producto altamente
valorado en su país, pero internacionalmente logró resarcir el cine de Japón y
junto a Kurosawa fue uno de los más importantes artistas en explotar este
ámbito. Después de su reconocimiento internacional, Japón recién empezaría a
prestar más atención al trabajo de Mizoguchi.
Para
esta película, Mizoguchi contaría con dos actores de reconocida calidad.
Machiko Kyo se había destacado en su participación en Rashomon (1950) de
Kurosawa y tendría varios proyectos con Mizoguchi, siendo este el más
importante. Kyo es una de las actrices más reconocidas de Japón y actualmente
se mantiene en actividad en diferentes producciones de su país. Masayuki Mori
también fue un actor muy prolífico llegando a tener grandes colaboraciones con
Kurosawa, Mizoguchi y Naruse, entre otros. Al igual que Kyo aparecería en
Rashomon, teniendo un gran despliegue de performances en los años 50 y 60. Junto
a ellos, aparecen muchos actores regulares de Mizoguchi, pero destaca sobre
todo Kinuyo Tanaka, una actriz importante en la vida artística y sentimental
del director japonés, colaborando en 15 de sus películas. Tanaka tendría una
gran influencia en el cine japonés, siendo actriz desde la etapa muda y siendo
parte de la primera producción hablada de su país. Su relación con Mizoguchi se
quebraría al intentar ella convertirse en directora, lo cual provocaría la
inexplicable oposición de Mizoguchi. Tanaka terminaría siendo la segunda
directora de su país.
Ugetsu
tiene la sensibilidad de un director reconocido por su tratamiento sobre los
personajes femeninos y sobre el sentido de moralidad y realidad. La película se
debate entre la crudeza de un país en guerra y sus consecuencias, siendo parte
de ello el elemento fantástico que pone énfasis en las raíces culturales y
religiosas del país. El estructurado guión sería revisado interminablemente por
Mizoguchi y Yoshikata Yoda con cambios constantes y variables de presentación,
y ese toque del maestro japonés es una clara muestra de porqué es uno de los
más claros exponentes de su país, siendo en los años 50 creador de “exóticas”
producciones para Estados Unidos y Europa. Ugetsu mantiene una línea poética,
gracias a la fastuosa cinematografía y al también cuidadoso tratamiento en
cuanto a la edición y sonorización, que logran interpretar escenas claves
dentro del filme. Muchos críticos coinciden con que Ugetsu es una película
perfecta, inspiradora y dedicada al cine como neta expresión artística, lo cual
es uno de los más grandes logros de Mizoguchi durante toda su carrera: la
representación de su sensibilidad a partir de todos los medios que el cine le
ha proporcionado, logrando así obras maestras de calidad, de influencia y de perdurabilidad.
Datos.
Título
Original: Ugetsu Monogatari
Dirección:
Kenji Mizoguchi
Año:
1953
País:
Japón
Intérpretes:
Machiko Kyo, Mitsuko Mito, Kinuyo Tanaka, Masayuki Mori, Eitaro Ozawa, Ikio
Sawamura, Kikue Mori, Ryosuke Kagawa, Eigoro Onoe, Saburo Date, Sugisaku Aoyama
Duración:
94 min.
No hay comentarios:
Publicar un comentario