domingo, 18 de diciembre de 2016


EL PIBE



Intro.

Avanzamos lentamente mientras procuramos respetar la niñez. Otorgamos aquello que creemos positivo mientras reímos ante sus casuales travesuras y sus inusitadas muestras de madurez. Mientras van creciendo, crecemos con ellos. Mientras imitan nuestros movimientos y pareceres nos preguntamos cuan peculiares somos, aunque todo el mundo solo observa cuan graciosos somos.





Cuerpo.

Charles Chaplin es sin duda el más grande comediante de todos los tiempos. Su capacidad para la comedia se veía reforzada con la combinación perfecta de este género con el drama, lo que hizo de algunos de sus filmes los más importantes de la era muda y que aún se mantienen como joyas imperdibles en el imaginario de la gente. Debido a su infancia difícil en Inglaterra, Chaplin se vio forzado a un rápido despertar en su niñez pero al mismo tiempo entendió el gran talento que poseía y que lo hacía muy agradable al público. Sus presentaciones teatrales y su incursión al cine fueron peldaños arduos pero consagratorios, haciéndolo una de las personalidades más reconocidas a finales de los años diez.





Su gran capacidad para sus filmes cortos y la creación inigualable del vagabundo (o Charlot, como se le conoce comúnmente en Francia y Europa), lo convirtieron en una estrella, recibiendo halagos por público y crítica. La capacidad de Chaplin estaba en toda su efervescencia y la necesidad para controlar todos sus productos lo volvieron un trabajador incansable, moldeando cada detalle de sus obras y cómo quería que estas fueran percibidas por el mundo. Junto a Mary Pickford, D. W. Griifith y Douglas Fairbanks fundó United Artists y este sería el medio por el cual lanzaría su primer largometraje: El Pibe.





Si bien muchas de sus entregas hasta este momento tenía una estructura básicamente de comedia, El Pibe tendría la alternancia de la comedia y el drama, algo con lo cual Chaplin sabría manejar a perfección (en este rubro, Luces de la Ciudad sería la cumbre convirtiéndose en una de las más grandes películas de todos los tiempos). Tal cual lo anuncia El Pibe en su introducción (“Una película con una sonrisa… y tal vez, una lágrima”), esta sería la entrega más laboriosa de Chaplin hasta el momento y también una de las más sentimentales, muchos señalan que esto se vio influenciado por la pérdida del  primer hijo de Chaplin.





Uno de los puntos importantes sería la inclusión en el elenco del niño que debía interpretar a uno de los personajes principales. El elegido de esta labor sería Jackie Coogan. Lo que tal vez nadie calculó sería la gran popularidad y aceptación del filme, haciendo del joven Coogan en una estrella inmediata y convirtiéndolo en el primer niño siendo una estrella de cine. Con tan solo ocho años, Coogan sería el rol protagónico de El Pibe, pero no era algo tan alejado para él. El padre de Coogan, John Henry, era actor y el mismo Coogan ya había sido parte de diferentes producciones, incluyendo una pequeña parte en uno de los cortos de Chaplin. Su imagen sería publicitada masivamente, pero la fama temprana dañaría su carrera, al igual que el manejo del dinero por parte de su madre y su padre adoptivo. Gracias a sus demandas se crearía una ley en donde los niños actores tuvieran asegurado un porcentaje de sus ganancias y que se conocería como la ley Coogan. En televisión, Coogan sería reconocido en los años sesenta como el tío Fester de Los Locos Addams.





Acompañado de la regular Edna Purviance, Chaplin hace un melodrama junto a sus usuales actos cómicos, creando uno de los mejores filmes de 1921 y lo que muchos críticos refieren a una de las mejores entregas del cine mudo. La historia de un niño huérfano encontrando por el vagabundo y su relación, incluso en sus trucos, nos muestra una divertida historia y un drama muy real que se compenetra no solo por la gran actuación de Coogan sino por esa capacidad de Chaplin para proponer una inventiva a partir de temáticas conocidas. El director inglés se nutre la búsqueda de nuevas formas creativas y al desarrollo de su personaje y su entorno. Este es el punto de comienzo de los largometrajes para Chaplin y con los cuales explotaría su carrera a niveles inimaginables, preponderando el arte por encima de todas las cosas.






Datos.

Título Original: The Kid
Dirección: Charles Chaplin
Año: 1921
País: Estados Unidos
Intérpretes: Charles Chaplin, Jackie Coogan, Edna Purviance, Carl Miller, Tom Wilson, Henry Bergman
Duración: 68 min.



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