LO
QUE EL VIENTO SE LLEVO (II)
Intro.
Érase
una vez… y una vez el mundo colapsó y nos entregó todo aquello de lo cual se
nutre al mundo, con sus edificaciones y construcciones, con su naturaleza de
grandes campos verdes, de altísimos árboles y de praderas interminables. Érase
una vez y como la voz original que levanta mares y tierras todo se fue
colocando precisamente como debería ser colocado y cada pieza del rompecabezas
fue una genial inspiración del tiempo y del espacio. Crear y recrear para
dibujar y tonificar. Imaginar y abrir los ojos para ver que ya no solamente
nuestra mente es aquella que puede estar ligada a lo inimaginable. Se puede
crecer con sus voces, con los nombres inmortales de rostros jóvenes que inundan
miles de pantallas, se puede ser ellos por unos cuantos segundos y sobre todo,
se puede repetir con orgullo las frases y pretender que somos niños jugando a
ser adultos… érase una vez que el viento arrastró con todo y aún así, nos dejó
todo lo que se llevó.
Cuerpo.
La
dirección y el guión probaron ser también una odisea. En los créditos de la
adaptación se encuentra el nombre de Sidney Howard. Un gran escritor de dramas,
Howard destacó en el teatro con la adaptación de varias de sus obras. Si bien
el público no siempre respondía positivamente a sus entregas, la crítica
especializada reconocía su talento. Samuel Goldwyn lo contrataría para trabajar
en los guiones de la película. Muy capaz en este rótulo, Howard logró dos
nominaciones al Oscar por Arrowsmith y Dodsworth. La tercera la ganaría
póstumamente por Lo Que el Viento se Llevó. Pero el guión no fue solamente
parte de su trabajo. Selznick solamente colocó su nombre en los créditos como
un homenaje a su temprana muerte antes que la película pudiera ser estrenada.
Pero la película fue revisada también por Oliver H. P. Garrett, Ben Hecht,
Barbara Keon y Jo Swerling. Howard había hecho el guión original, pero estaba
diseñado para una película de seis horas. Selznick llamó a varios escritores
para reducir y alterar dicho guión. Varios fueron los escritores que
contribuyeron, incluso Selznick mismo, pero al final solamente cuatro fueron
reconocidos y solo Howard estuvo en los créditos.
En
cuanto a la dirección, el nombre nominado era George Cukor. La elección parecía
natural. Cukor era un colaborador de Selznick por muchos años y era un gran
director de actrices. Cukor estaría relacionado por dos años en la
preproducción del filme y solo duraría alrededor de tres semanas en la
filmación. Los problemas con Selznick se produjeron por la óptica en como tomar
la película. Sus visiones se distorsionaron y si a ello incluimos a Clark Gable
como actor principal, algo que le disgustaba a Cukor, hizo que el director
saliera del proyecto. Vivien Leigh y Olivia de Havilland hablaron a favor del
director, pero la decisión estaba tomada, su reemplazo sería Victor Fleming.
Para esos momentos, Fleming estaba filmando El Mago de Oz y ambas películas a
pesar de llevar su sola autoría en la dirección fue parte de diferentes
colaboraciones. En el caso de Lo Que el Viento se Llevó, Fleming debió ser
reemplazado por dos semanas debido a cansancio por Sam Wood. El trabajo de los
tres directores se encuentra en el resultado final de la película.
Lo
Que el Viento se Llevó se convirtió en una sensación instantáneamente. Comenzó
a romper todos los records y todas las expectativas posibles. Sería nominado a
trece premios Oscar ganando ocho de ellos y siendo acreedor de dos premios
Oscar honorarios. Ganaría como mejor película, mejor director, mejor actriz,
mejor guión adaptado, mejor actriz secundaria, mejor cinematografía, mejor
edición y mejor dirección de arte. La popularidad de todos sus participantes
incrementó en demasía y aquellos no tan populares empezarían a ganar fama. Vivien
Leigh se ganó todos los aplausos de público y crítica mientras que Hattie
McDaniel se convirtió en la primera mujer de color en ganar un premio Oscar.
Gable continuó agregando palmares a sus grandes actuaciones y Howard volvería a
Inglaterra a tener un mayor impacto en el arte, la política y la sociedad de su
país. Selznick se proclamó como el productor por excelencia y toda su vida
buscó otro triunfo como Lo Que el Viento se Llevó, pero este nunca llegaría. Fleming
siempre fue un director reconocido en MGM dirigiendo los mejores filmes del
estudio. En 1939 con la realización de El Mago de Oz y Lo Que el Viento se
Llevó se convirtió en una leyenda, pero al mismo tiempo no volvió a encontrar
la misma fama de este y otros años anteriores.
La
película pertenece tanto a su productor como a sus actores. Selznick se decidió
a crear este gigantesco proyecto a partir de su poder económico y a su posición
de productor importante y destacado, que durante años estuvo metido en el
negocio y donde supo resaltar a través de muy buenas películas. Su desempeño
en la adaptación de la novela de Margaret Mitchell radica en su necesidad y
obsesión de mantener todo bajo su control. Si bien contaba con un grupo
numeroso de colaboradores y asistentes, Selznick desarrollaba cada decisión
importante a partir de su laborioso proceso de selección y elección. Lo que el
Viento se Llevó no sería posible a partir de otra persona. Estuvo bajo la
tutela de su suegro, Louis B. Mayer y tuvo que llenar el vacío dejado por el
gran Irving Thalberg, pero logró demostrar con réditos su capacidad para el
negocio. La película también debe mucho a sus actores, sobre todo a Vivien
Leigh que cumple con el sueño del papel deseado y con una actuación sin
quiebres, demostrando todas sus capacidades teatrales y su gran asociación con
Olivier. Al lado de Leigh, destacan sobre manera Olivia de Havilland y Hattie
McDaniel, las dos actrices secundarias nominadas al Oscar. Su labor es también
impecable y de gran sustento, demostrando estar preparadas para una película de
tales magnitudes. Tanto Gable como Howard son dos actores de gran nivel cuyas
imágenes están inmortalizadas en dicho filme, ya que cuentan con una gran
reputación precedida por sus actuaciones anteriores y porque cumplen a
cabalidad al resarcir en este megaproyecto. Lo Que el Viento se Llevó no solo demostró
ser una película de inmensas magnitudes, sino también irrepetible. Hollywood
alcanzó posiblemente su punto más alto en cuanto a su peculiar fórmula de hacer
películas y si bien durante los años cuarenta y cincuenta siguieron
demostrándolo, paulatinamente con la desaparición de los sistemas de estudio y
con el cambio del cine durante las décadas siguientes se demostró que películas
épicas como Lo Que el Viento se Llevó solamente pertenecen a un tiempo y a un
espacio determinados, imposibles de repetir o imitar.
Datos.
Título Original: Gone with the Wind
Dirección:
Victor Fleming
Año: 1939
País: Estados Unidos
Intérpretes: Clark Gable, Vivien Leigh, Olivia de
Havilland, Leslie Howard, Thomas Mitchell, Barbara O’Neil, Evelyn Keyes, Ann
Rutherford, George Reeves, Fred Cane, Hattie McDaniel, Oscar Polk, Butterfly
McQueen, Victor Jory, Everett Brown, Howard C. Hickman, Alicia Rhett, Ran
Brooks, Carroll Nye, Laura Hope Crews, Eddie Anderson, Harry Davenport, Leona
Roberts, Jane Darwell, Ona Munson, Paul Hurst, Cammie King Conlon, J. M.
Kerrigan, Jackie Moran, Lllian Kemble-Cooper, Marcella Martin, Mickey Kuhn,
Irving Bacon, William Bakewell, Isabel Jewell, Erci Linden, Ward Bond, Yakima
Canutt, Louis Jean Heydt, Olin Howland, Robert Elliott, Mary Anderson, Cliff
Edwards
Duración:
238 min.
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