domingo, 16 de octubre de 2011


UNO CONTRA TODOS




Intro.

En el campo de la creación, las construcciones mentales de un hombre parecen desmoronarse ante la realidad. Ante el real golpe del acero, un sueño es la simple imaginación malgastando su tiempo. Ante ello, un hombre golpeado por los años parecería ser un esclavo de sus propios segundos… pero no cuando este hombre tiene la mirada inconfundible de la persistencia. La lucha por la toma de poder en la creación ha empezado y mientras uno es más fuerte, así también lo es su adversario. Encaminar nuestras fuerzas ante estatutos impenetrables nos muestra insensatos pero insanía sería pensar que la vida es sueño.





Cuerpo.

Uno Contra Todos es una producción americana interesante proveniente de un best seller y que cuenta con un gran reparto. El drama nos muestra la calidad de sus escenas así como la calidad de sus intérpretes. Lamentablemente ocurre en ocasiones que dichas producciones se encuentran opacadas por vínculos externos que impiden una clara apreciación por parte del público. El dilema en cuestión provendría del tórrido romance entre Gary Cooper de 48 años y Patricia Neal de 23 años. Para dicho momento, Cooper estaba casado con Veronica Balfe y el escándalo se hizo público. Neal quedaría embarazada y Cooper le exigiría el aborto. Balfe se enteraría un año después encarando a Neal y posteriormente la hija de Balfe, Maria, agredería a Neal en público. El hecho del romance llevaría la película a un acercamiento del público motivado más por las escenas de amor de los dos personajes que por la película en sí.




La película está basada en el libro homónimo de Ayn Rand, su primer éxito total. Rand sería conocida por esta novela y por su aún mayor éxito, su novela filosófica La Rebelión de Atlas, donde desarrolla los primeros esbozos de lo que sería su teoría filosófica del Objetivismo. Uno Contra Todos, también conocida como El Manantial, tiene en su realización uno de los más largas oratorias dentro de una película, alrededor de los seis minutos. Vidor había aceptado la incursión de dicho discurso pero en la filmación lo encontró poco práctico decidiendo hacer una reducción. Rand se quejó con el estudio debido al previo acuerdo sobre la escena amenazando con una demanda. Así, el estudio cedió y todo el discurso fue insertado dentro del filme.




La fortaleza de la película reside en la fortaleza de sus tres actores principales: Gary Cooper, Patricia Neal y Raymond Massey. Para 1949, Cooper era una estrella establecida y reconocida mundialmente. Había ganado el Oscar por El Sargento York de 1941 y había actuado junto a los más grandes directores y actrices del medio. Sus futuras actuaciones lo ligarían al western, con actuaciones formidables llegando incluso a ganar su segundo Oscar por A la Hora Señalada (1952). Gary Cooper es uno de los emblemáticos actores americanos de todos los tiempos. Su rostro tranquilo y su intensidad contenida lo hacen un individualista dentro del mundo de la actuación con numerosos méritos en su haber. Por su parte, Patricia Neal también es una actriz de carácter. Habiendo comenzado en el teatro, Neal ganaría un Tony en la primera entrega de dicha condecoración en 1947. De pocas actuaciones, Neal ganaría un Oscar por su gran despliege en Hud (1963). Sus problemas personales la privarían de una mayor filmografía pero sería altamente reconocida en todos los trabajos que apareció. Por último, Raymond Massey, actor canadiense, cumple uno de sus más logrados roles en esta película. De origines teatrales, Massey es un actor muy correcto imprimiendo en sus personajes una solemne elegancia. A pesar de pocas actuaciones principales, Massey logró destacarse tanto en el teatro, en el cine y posteriormente en la televisión, siendo muy recordado por su intervención en la serie Dr. Kildare.




La película muestra un gran despliegue de emociones. Pasional, intrigante e incisiva en cuanto al tema de los valores, la película de Vidor logra mantenernos en atención, gracias también a las orquestadas muestras dramáticas que se van desplegando cada cierto tiempo. La película es sin duda un gran logro gracias al libro de Rand, pero es también el director Vidor quien imprime la vitalidad de los personajes, basándose en su experiencia en cuanto a causas perdidas y confrontación de valores. No hay que olvidar que Vidor ya se había convertido en una leyenda en su medio cuando realizado dos películas mudas que quedan para la posteridad, El Gran Desfile (1925) y La Gente (1928).




Datos.

Título Original: The Fountainhead
Dirección: King Vidor
Año: 1949
País: Estados Unidos
Intérpretes: Gary Cooper, Patricia Neal, Raymond Massey, Ken Smith, Robert Douglas, Henry Hull, Ray Collins, Moroni Olsen, Jerome Cowan
Duración: 114 min.

lunes, 10 de octubre de 2011


EL HOMBRE QUE VENDIÓ SU ALMA





Intro.

Unas cuantas monedas se encuentran en tu puerta. Unas cuantas monedas de oro se encuentran en tu camino para tu felicidad y la felicidad de los tuyos. Unas cuantas monedas invaden un espacio para decir que no son unas cuantas monedas sino que son demasiadas monedas para llevar en un bolsillo o en una maleta. Unas cuantas monedas han vendido a ofrecer tranquilidad y regocijo a cambio de algo muy incircunstancial, algo que no sabrías como describir y que no sabrías que puede ser vendido. Así, las monedas son la representación de algo que ocurre todos los días cuando despiertas y no recuerdas tu nombre, cuando el espejo te devuelve una imagen que no es para nada conocida. Oh, sí, alguien ha venido para que recuerdes como empiezan los acuerdos.




Cuerpo.

Traducida literalmente como El Demonio y Daniel Webster, El Hombre que Vendió su Alma es una distribución de 1941 de RKO cuyo título original sería cambiado por All That Money can Buy (Todo lo que el Dinero puede Comprar) para evitar confusiones con otro película del mismo año, The Devil and Miss Jones. La película sería un éxito para la crítica pero un moderado logro en la taquilla. Su posterior éxito se debe a una temática fantástica acompañado de unos logrados efectos especiales y a la combinación de antiguas baladas americanas con música original creada por Bernard Hermann, quien ganaría un Oscar por esta película.




La historia de Daniel Webster fue tomada del cuento homónimo de Stephen Vincent Benéty adaptada por el mismo autor y Dan Totheroh. La película sería dirigida por William Dieterle, un director alemán desde los años veinte y cuya prolífica carrera en Hollywood lo convertiría en centro de atención por sus producciones en los años treinta y cuarenta. Su versatilidad le permitió dirigir películas de muchos calibres, desde comedias, fantasías, dramas, épicas, trabajando con actores de alta calidad como Marlene Dietrich, Ronald Colman, Jennifer Jones, William Holden, Paul Muni, Joseph Cotten, Charles Laughton, Maureen O’Hara, entre otros.




El rol original de Daniel Webster fue para Thomas Mitchell pero en un accidente se rompería la pierna y tendría que ser reemplazado por Edward Arnold, quien cumpliría con una de sus tantas correctas actuaciones. El reparto lo completa un genial Walter Huston (padre del director John Huston), quien sería nominado al Oscar por su performance. Así mismo nos encontramos con la pareja de James Craig y Anne Shirley, quienes se ven un tanto opacados por las ya mencionadas actuaciones. Para Craig esté sería el rol que lo sacaría de las películas B llevándolo a una moderada consagración. En tanto, Shirley perteneció a ese grupo de niñas actrices con mucho talento pero que el tiempo las terminó catalogando a roles secundarios en su juventud hasta su temprano retiro a los 26 años. Completan el reparto un inspirado John Qualen, un actor de reparto de grandes méritos asociado sobretodo con la compañía de John Ford; Jane Darwell, la recordada ganadora del Oscar por su interpretación de Ma Joad en Uvas de Ira y la sensual Simone Simon, cuya asociación con Renoir en La Bestia Humana (1938) la llevaría a Estados Unidos para aparecer en esta película y posteriormente en La Mujer Pantera (1942) y dos años más tarde en la secuela de la misma, haciendo de estos sus años más populares.




La película nos muestra la difícil realidad de familias modestas con muchos problemas económicos pero con valores de la amistad y de la unión que buscan contemplar dos ámbitos bastantes graficados: los pobres de grandes valores y los adinerados de poca moral. Esta realidad se verá rápidamente invadida por el elemento fantástico y a partir de allí la película le pertenecerá al juego de escenas, los efectos especiales, la musicalización y una gran actuación de Walter Huston. El filme tendrá un culto posterior por dichos elementos, los efectos especiales no son constantes ni exagerados, parten de simples detalles perfeccionados que hacen de su uso un gran aporte. A ello se le agrega cantos tradicionales e historia americana que juega con el imaginario de un país, destacando sus valores y condenando a todos aquellos que han evadido el sendero del bien. La película sería cortada severamente hasta que el esfuerzo de muchos fanáticos logró recuperar su extensión original y su posterior restauración en sistemas modernos. El Hombre que Vendió su Alma es ahora una de las más recordadas de su director.




Datos.

Título Original: The Devil and Daniel Webster
Dirección: William Dieterle
Año: 1941
País: Estados Unidos
Intérpretes: Edward Arnold, Walter Huston, James Craig, Anne Shirley, Jane Darwell, Simone Simon, Gene Lockhart, John Qualen, H. B. Warner
Duración: 107 min.

jueves, 6 de octubre de 2011


LAS MANOS DE ORLAC





Intro.

Las manos pueden servir para muchos aspectos. Un trabajo que requiere la creatividad de un inventor. Las caricias que requieren de la sensibilidad de un amante. La destreza que requiere la pulcritud de un artista. Pero hay aspectos en la vida por el cual preferimos cortar manos. Cuando la sangre y el crimen son utilizados como algo ordinario es necesario evitar dichos eventos y tratar de erradicar la obsesión de la mente humana por la belleza llevada al extremismo y el asesinato llevado como única salida.





Cuerpo.

Karl Freund fue un experto en cinematografía, comenzando su carrera a los quince años en Berlín y siendo parte importante en el expresionismo alemán de los años veinte y comienzos de los años treinta. Freund emigraría a Estados Unidos donde continuaría su labor en diferentes corrientes, aunque se apegaría más a las películas de horror que fueron muy populares en los años treinta. Freund dirigiría solamente diez películas, de las cuales destacan La Momia (1932) con Boris Karloff y Las Manos de Orlac. Su labor continuaría en el perfeccionamiento del uso de cámaras destacándose en 1951 en el programa de televisión Yo Amo a Lucy.



El actor Peter Lorre parece superficialmente renombrado por su participación en Casablanca. Pero Casablanca es un trabajo menor dentro del inmenso e interesante mundo de creación de Peter Lorre. En 1931, su participación en M de Fritz Lang lo convirtió en una estrella internacional. El ascenso del nazismo lo llevó a Paris y Londrés, donde Hitchcock lo utilizó en dos producciones. Las Manos de Orlac marcaría su debut en Hollywood. Su carrera en Estados Unidos se debate en algunas películas de gran calidad (como Casablanca y El Halcón Maltés) y películas que alcanzaron gran popularidad y fueron éxitos de taquilla, siendo algunos de estos casos contraproducentes ya que Lorre no se sentía satisfecho participando en ellas, pero que finalmente colaboraron en una legión de fanáticos y en un reconocimiento a partir de su exploración de géneros.



Junto a Freund y Lorre, la película se destaca por la cinematografía de Gregg Toland. Mucha discusión hubo al respecto de Toland, ya que él también trabajaría posteriormente en El Ciudadano Kane, y en algunos aspectos pareciere que Orson Welles busca imitar la película de Freund. Toland cumple un excelente trabajo en ambas producciones, convirtiéndose en uno de los más grandes cinematógrafos de su tiempo, de innovadores técnicas y creando teorías sobre el uso de la luz y la profundidad. Así, Las Manos de Orlac es un producto que descansa en sus aspectos técnicos así como la gran capacidad de Peter Lorre en el rol principal. Adaptada de la obra homónima de Maurice Renard, existió una versión muda de 1924 dirigida por Robert Wiene y estelarizada por Conrad Veidt. El enfoque oscuro de la película forma parte de las conocidas películas de terror de los años treinta y a pesar de las críticas reservadas de su tiempo, la película de Freund ha alcanzado un nivel de culto, debido a su peculiar guión y a la actuación de Lorre.




Datos.

Título Original: Mad Love
Dirección: Karl Freund
Año: 1935
País: Estados Unidos
Intérpretes: Peter Lorre, Frances Drake, Colin Clive, Ted Healy, Sara Haden, Edward Brophy, Henry Kolker, Keye Luke, May Beatty
Duración: 68 min.

jueves, 29 de septiembre de 2011


ASESINATO POR CONTRATO




Intro.

Como seres humanos estamos acostumbrados a especializarnos en un trabajo y hacerlo de manera más correcta y eficaz posible. El tiempo y la experiencia intensificarán dicho trabajo, que en algunos casos será el único medio de vida mientras que para otros será el devenir de una labor agradable. Personificar a una persona cuyo trabajo es arduo, inclusive con tantos años de experiencia, es interpretar el cansancio bien llevado, el stress bine resuelto y el dinero, sobretodo el dinero. Cuando un trabajo es prácticamente un arte es necesario el financiamiento. Perdurar significa perfeccionar… y enriquecerse.






Cuerpo.

Asesinato por Contrato no fue una película reconocida en su tiempo. Su distribución y exposición fue baja, pero con el paso de los años la película ha sabido colocarse como una de las más peculiares formas del film noir. Reconocida por un estilo agradable dentro de su propia tónica, la vida de un asesino a sueldo es mostrada como una existencia de peculiares tonalidades, mostrando un lado simpático del personaje y su profesión. La película dirigida por Irving Lerner cuenta con guión original de Ben Simcoe y con la colaboración de Ben Maddow, quien había sido nominado al Oscar por su guión en La Jungla de Asfalto. La película sería filmada en siete días. Parte de su posterior fama se debe a Martin Scorsese, quien la calificaría como la película de mayor influencia en su carrera.





Vince Edwards es el personaje principal. Su labor en el cine es en contadas apariciones, sobretodo en algunos film noirs. Su estrellato empezaría en la televisión cuando hiciera de doctor en el programa Ben Casey (1961-1966). La popularidad de la serie lo llevó a volver al cine en contadas películas e inclusive a realizar varias producciones musicales con cierto éxito.





La psicología empleada dentro de  la película es notable. El personaje principal es un asesino a sueldo por necesidad, entendiendo que ante una labor convertirse en especialista es sinónimo de mayores dividendos. Es así como empieza a ser un asesino de sueldo atípico. Sus contratos los finaliza de maneras peculiares teniendo como regla no portar un revolver o no matar mujeres bajo la creencia que son impredecibles y por tanto muy complicadas para matar, a diferencia de los hombres. Este extraño personaje encaja dentro de una atmósfera propicia producida por el juego de cámaras, la música y el tratamiento de escenas así como también la metodología del personaje tomando en cuenta sus propias reglas.






Datos.

Título Original: Murder by Contract
Dirección: Irving Lerner
Año: 1958
País: Estados Unidos
Intérpretes: Vince Edwards, Phillipe Pine, Michael Granger, Caprice Toriel, Herschel Bernardi
Duración: 81 min.

domingo, 25 de septiembre de 2011


GENEVIEVE





Intro.

Los caminos del amor son muy similares a los caminos de la carretera. La voluntad de un hombre con su vehículo provoca senderos peculiares, como si recorrer una ciudad se tratara de recoger todos los rostros que tu velocidad no puede vislumbrar. Pero cuando no es solamente tu vehículo, es una carrera de dos hombres con sus maquinas, entonces es allí donde se embarcan en una lucha que es más el poder de un vehículo sobre otro, es más la determinación de un hombre sobre otro… son dos niños tratando de sacarse la lengua.




Cuerpo.

Henry Cornelius solo hizo cinco películas durante toda su carrera, pero estuvo envuelto en el cine mucho antes de su debut como director. Trabajó al lado de René Clair y de Alexander Korda, antes de embarcarse a la creación de documentales en Sudafrica, su país de origen. Al volver a Inglaterra, su amigo Alberto Cavalcanti le consiguió un contrato en los Estudios Ealing, donde fue guionista y productor, debutando como director en 1949 con Pasaporte a Pimlico. El éxito de la película lo llevó a pedir un mejor salario y al serle denegado renunció a Ealing. Para la Organización Rank hizo Genevieve volviendo a la popularidad. Sus otras películas no tendrían resonancia alguna y moriría filmando Ley y Desorden (1958), siendo terminada por Charles Crichton.




Genevieve trata sobre una carrera entre dos amigos y sus respectivas parejas. John Gregson y Dinah Sheridan son Alan McKin y Wendy McKin, mientras que Kenneth More y Kay Kendall son Ambrose Claverhouse y Rosalind Peters. Ambas parejas se enfrentarán por ganar una carrera que contiene mucha historia. La película fue enormemente popular en el Reino Unido y consagró a sus cuatro actores principales, aunque en algunos casos como el de Kenneth More ya contaban con experiencia y fama en su haber. Aún así la película guarda no solamente recuerdos gracias al recorrido que hacen, mostrando las costumbres y los lugares de Inglaterra sino también a la carrera en sí, un particular evento que es el recorrido más largo en motor del mundo.




El recorrido de autos antiguos desde Londres a Brighton es la denominación de esta particular competencia iniciada en 1896. La competencia estipula que participan automóviles creados antes de 1905 y recorre una distancia de 187 km teniendo los carros como velocidad máxima 32 km/h. En sí, no hablamos de una competencia ya que no hay ganadores, se les otorga una medalla a todos los que acaban antes de las 4:30 p.m. (la carrera empieza al amanecer). Durante los siguientes años la carrera cobraría gran fama incluyendo entre sus participantes a famosas celebridades (entre ellos el Príncipe Raniero y Grace Kelly en 1968). Genevieve, creada en 1953, fue un homenaje a dicha carrera y el recorrido y vivencias durante la película son recreadas anualmente como parte de un circuito turístico. Así mismo, los autos utilizados en la película son preservados para dichos eventos.





Datos.

Título Original: Genevieve
Dirección: Henry Cornelius
Año: 1953
País: Reino Unido
Intérpretes: John Gregson, Dinah Sheridan, Kenneth More, Kay Kendall
Duración: 86 min.